Te enojaste con Dios y por eso, te estás desquitando... Y te estás
haciendo daño a ti mismo, al fin y al cabo. También estás hiriendo a los que te aman.
Si eso es lo que quierías, lo estás logrando y haciendo el papel de necio.
Pero,
No es demasiado tarde.
No sigas en este camino.
Dios
te ama, pero, si en realidad eres hijo de Él, habrán consecuencias las
cuales, tú no podrás controlar, porque, ¿quién puede pelear contra Dios y
ganar?
No tardes.
Regresa.
Estás a tiempo.
Y Dios te ama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Cada comentario deberá ser aprobado antes de ser publicado.