martes, 31 de diciembre de 2019

Metas a largo plazo: dejando un legado eterno


Nuevo año. 

¿Habrá algo mágico en un Año Nuevo? No cambiarán las cosas, las circunstancias o las actitudes sólo porque haya un Año Nuevo. De la misma manera, el día antes de tu cumpleaños, prácticamente eras la misma persona que el día de tu cumpleaños. Si algo va a cambiar, es porque ya está planeado, como tal vez mudarse de casa o comenzar un trabajo nuevo.

No me mal interpretes. No es que yo no quiera que se celebre un Año Nuevo o un cumpleaños, sino que, no debemos ilusionarnos o estar en un estado de euforia o alegría excesiva sólo porque haya un Año Nuevo, un cumpleaños o un día de fiesta.

Si vas a aprovechar el Año Nuevo para fijarte unas metas, ¿por qué no fijarte unas metas para dejar un legado a tus hijos, a tus nietos o familiares y aún a la sociedad? ¡Un legado eterno!
Vas a dejar un legado, quieras o no. 

Se me ocurren unas posibilidades.

En primer lugar, el legado de la enseñanza planificada. En el Salmo 78, vemos que Dios quiere que les enseñamos a nuestros hijos las leyes y los estatutos de Dios, o sea, la Palabra de Dios. Dios quiere que demos testimonio de cómo Él ha obrado en nuestras vidas.

No las encubriremos a sus hijos, Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová,
Y su potencia, y las maravillas que hizo. El estableció testimonio en Jacob, Y puso ley en Israel, La cual mandó a nuestros padres

Que la notificasen a sus hijos; Para que lo sepa la generación venidera, y los hijos que nacerán; Y los que se levantarán lo cuenten a sus hijos, A fin de que pongan en Dios su confianza, Y no se olviden de las obras de Dios; Que guarden sus mandamientos, Y no sean como sus padres, Generación contumaz y rebelde;

Fíjate en lo que Dios dijo acerca de Abraham.

Génesis 18: 19
 Porque yo sé que mandará a sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino de Jehová, haciendo justicia y juicio, para que haga venir Jehová sobre Abraham lo que ha hablado acerca de él.

¿No crees que puedes hacer esto? ¡Claro que sí con la ayuda de nuestro buen Dios y Salvador! Y si piensas en tu corazón, Yo no soy perfecta o perfecto y voy a fallar, o ya le he fallado a mis hijos muchas veces y me lo echan en cara. O tal vez pienses, Ya es muy tarde, mis hijos están grandes, no le están sirviendo a Dios. Posiblemente pienses simplemente que es demasiado tarde en tu vida, que has pecado demasiado contra Dios y que no hay perdón para ti. Hay esperanza y no descartes que Dios contesta las oraciones y Él puede obrar y está obrando en ti y en tus hijos. 

Empieza hoy. Si no conoces a Cristo como tu Salvador, hoy mismo puedes arrepentirte de vivir sin Él, de ser pecador o pecadora, y le puedes pedir perdón y aceptarlo como tu único y suficiente Salvador. No confíes en tus propias obras, no confíes en tus donaciones, y no confíes en que eres una buena persona porque no lo eres. La Biblia dice en Romanos capítulo tres, No hay justo ni aún uno. No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. Dios nos deja saber nuestra condición verdadera de ser pecadores. 

Luego, después de aceptar a Cristo como tu Salvador, si no asistes a una buena iglesia bíblica independiente, busca una y si necesitas ayuda, avísame. Mientras tanto, necesitas leer la Palabra de Dios todos los días y orar todos los días.
¡No es demasiado tarde vivir para Dios, ser un ejemplo de la gracia y el perdón de Dios en tu vida, y hacer lo correcto delante de Dios y de la gente!

¡Qué gran legado eterno!

Si tienes preguntas, comunícate conmigo, por favor. Que Dios te ayude.


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