Estimada Princesa,
Hay tantas cosas que pasan por tu mente, ¿no
es así? Te sientes feliz en un instante, y casi enseguida, te sientes insegura.
Tal vez estás pendiente a lo que los demás están diciendo de ti. Quieres ser
aceptada, especialmente por los jóvenes Cristianos que andan por ahí. Quieres
verte segura de ti misma, pero por dentro, hay muchas emociones corriendo por
tu mente y corazón.
Tal vez te preguntes qué hacer para tener paz
interior, para tener tus emociones realmente en su lugar y no solo bajo control.
Probablemente sueñas con la idea de que conocerás El Hombre Ideal, que todo lo puede, que sabe lo que él quiere en la
vida, que te dará todo lo que quieres, que vivirás en una casa grande y serás
feliz.
Mi querida princesita, quiero darte un buen
consejo. No es lo que tú esperas, eso sí. Deja de soñar tanto. No te ayuda a
madurar y crecer en el Señor. En vez de soñar, mejor debes... Pero no, te diré
otro día. Qué duermas bien.
Alguien que ha estado en tu lugar...